viernes, 23 de febrero de 2007

La Guerra de los Sexos (Parte II)

Ante todo muchas gracias por los comentarios (aunque no son muchos, pero me hacen sentir un poquito mejor). Hoy pienso continuar con el post anterior, en el que hice alusión a todas aquellas cosas nefastas de las mujeres, pero hoy le toca a mi propio género, así que por un segundito me transformaré en mujer, sin peluca ni tinturas, tampoco tacones claro porque soy medio torpe y probablemente termine besando una baldoza (y perdiendo un par de dientes que servirán para emitir chiflidos tenues al pronunciar la palabra Acassusso).

1-Somos brutos, cuando queremos acariciar a la mujer, generalmente lo hacemos sin medir la fuerza y sin delicadeza, sin perjuicio que nuestra piel suele ser más áspera por la falta de delicadas cremas para el cutis. Los pelos tampoco ayudan al momento de dar un cariñoso beso, pinchamos y mucho (no se si recuerdan cuando eramos chicos y nos saludaba el tío Juan Carlos con esa barba espantosa que pinchaba mucho, y por eso lo evitabamos claro, también por sus obsenos regalos navideños -un par de medias-). Si jugamos a las peleitas con nuestra respectiva pareja, esta última termina gritando "BASTAAAA ME DUELEEEE" a la vez que se encabrona por nuestra brutalidad innecesaria y deja de hablarnos.
2-No somos comunicativos, la mujer debe preguntar y repreguntar las cosas para sacarnos los problemas con cucharita, realmente podemos estar del peor humor del mundo (por razones ajenas a nuestra pareja) y aún así no emitiremos palabra alguna, simplemente nos sentamos a mirar la TV y olvidar todo lo ocurrido a modo de lavado cerebral.
3-Algunos hombres son realmente fanáticos de cosas materiales, al punto que las prefieren a los seres humanos, digamos, un hombre fanático de su auto es capaz de discutir con su mujer porque cerró la puerta demasiado fuerte a su criterio. Otros más fanáticos aún les ponen nombres a las cosas al punto de considerarlas parte de su familia, y sentarlos a la mesa a cenar. He oído hombres hablar con su automóvil lo cual me dio un poco de escalofríos realmente (y tuve que irme silenciosamente de ese garage cerrando la puerta despacito para no interrumpirlos).
4-Somos muy mentirosos, ocultamos nuestros defectos para parecer mejores ante los ojos de una mujer, y luego vamos pelando la hilacha con el tiempo, nos desabrochamos el botón del pantalón y sacamos panza con orgullo a la vez que dejamos los postizos en un vasito al lado de la mesa de luz. También mentimos con el propósito de mantener nuestro orgullo viril, exagerando el tamaño de nuestros órganos sexuales con amistades masculinas incluso, y hablando de relaciones casuales con más de una mujer a la vez en la misma noche, y por sobretodo la cantidad es lo más importante... "AYER ME ECHE 4 O 5 AL HILO!! Y CADA UNO DURO UNA HORA Y MEDIA MAN!!!" cuando la realidad es que probablemente se acogotaron la gallina mirando alguna página cochina en la "interné" durante 10 segundos y se fueron a dormir temprano.
5-Pensamos en sexo el 99,99% del tiempo, todo aquello que puede tener un doble sentido lo interpretamos del peor modo, cualquier tipo de descripción de una mujer debe incluír el tamaño y forma de sus senos y trasero (por ejemplo: ayer pasé por la capilla... había una monjita.. no sabessss qué par de t**as, que buen oj*te man, una terrible perra!), poco y nada nos importa la personalidad de las féminas al momento de comentar con amistades. Somos capaces de mirar un programa sin contenido alguno como "LA PELUQUERIA DE DON MATEO" (y derivados del grupo Sofovich) solo para ver mujeres con poca vestimenta mostrando carnes. Somos tan pero tan paj*ros que somos capaces de comprar un producto de malísima calidad, como el desodorante Axe (que si lo piensan friamente su fragancia no dura más de 10 minutos sobre nuestro cuerpo, y el estándar no tiene nisiquiera anti-transpirante) solo porque dice que atrae a las chicas de la publicidad!!! Dios...
6-Nos la pasamos quejándonos de nuestra relación de pareja, boqueamos todo el tiempo diciendo lo mal que nos trata nuestra esposa/novia, y lo mucho que sufrimos, sin embargo cuando se trata de terminar la relación, el hombre no se atreve a hacerlo porque: a-Es cagón, b-Es muy cagón, c-No tiene huevos, d-En el fondo no puede vivir sin su pareja. Así las cosas, dejan que la relación se deteriore con el tiempo, descuidándola un poco adrede, y cuando la mujer finalmente decide terminar con todo, lloramos como bebés y nos deprimimos como perros abandonados bajo la autopista.
7-Hacemos nuestras necesidades fisiológicas en cualquier lugar, sobre todo el Nº1, vamos a cualquier arbolito y lo orinamos a modo de animalitos salvajes desagradables (esta situación se da en los accesos a las estaciones ferroviarias también, donde el olor a orina no nos deja respirar sin largar una lágrima por la peste). Si vamos a un baño ajeno, no se por qué pero siempre terminamos orinando algún sector del piso del tocador, admitamos de una vez que es imposible controlar el caudal de orina desde el principio por medio de la telekinesis y evitar salpicar todo. Lo peor es orinar cuando la tabla esta baja, una obra de arte al mal gusto encontrar un charquito en la tabla al momento de sentarse sobre el inodoro para hacer del Nº2. Los baños públicos de hombres (para que sepan) suelen ser una recreación de Hiroshyma, tiene que intentar no pisar el 90% del piso por la gente que no puede apuntar, así las cosas si llega cerca del inodoro, probablemente vea escrituras antiguas hechas con navajas en las puertas con dibujos tribales (similares a un miembro viril masculino, como el del tatuaje de la espalda de Cristian Castro o Enrique Iglesias, no se cual de los dos bufarras había sido), también podrá ver que el antecesor de la utilización del adminículo olvidó tirar la cadena... y verá una sustancia amarillenta con papeles nadando por sus vidas en círculos, los cuales nunca pasarán por el caño de desagüe, y por último quizás vea restos de mucosidades adheridas en las paredes aledañas. Si en cambio desea orinar en los dispositivos colocados contra la pared, deberá cuidarse del famoso "Fisgón Comparador" que se asomará por encima del hombro para pispear cuán grande lo tiene su compañero de baño casual. (Nota: algunos hombres suelen ser más tímidos y toman el espacio más oculto y aislado para evitar la curiosidad). Por último diría yo que conforme a las estadísticas realizadas por el INADHIPE (Instituto Nacional de Higiene Personal) el 50% de los hombres no se lava las manos al salir del baño, lo cual me parece de muy mal gusto sobre todo cuando dan esas palmaditas en la espalda de modo amistoso para secar sus desperdicios en nuestra ropa.
8-Cuando manejan, notará que los hombres al frenar en un semáforo en un 90% comenzarán a extirpar mucosidades con su dedo índice colocado en el interior de la nariz. Una vista repulsiva, pero con un propósito, mirar el semáforo para arrancar rápidamente al estar en verde la luz, y descomprimir las calles con agilidad (mejor aún que esa mentira de "la Guardia Urbana").
9-En la gran mayoría desconocemos como se hace una buena combinación de colores de ropa, nos vestimos con lo que tenemos al alcance de la mano para no revolver mucho. Podemos usar zapatos blancos con medias tipo toalla blancas y un pantalón de jean marron con cinturón negro, sumado a esa hermosa camisa a cuadros tan cómoda que siempre llevamos a todos lados. Nuestra noción de la moda es muy reducida y poco nos importa, generalmente son las mujeres quienes eligen nuestra vestimenta del día por nuestra falta de gusto, si intentamos hacerlo por cuenta propia, fracasamos y nos corrige nuestra pareja moviéndo su cabeza de modo horizontal de izquierda a derecha, mordiéndose el labio inferior y cruzándo sus brazos. Los hombres que conocen la moda a la perfección y por sí mismo son fanáticos de la vestimenta, suelen ser homosexuales para decepción de todas aquellas mujeres que se ilusionan al ver a un hombre vestido de manera impecable.
10-Tienen un fanatismo inculcado por los eventos deportivos, preferentemente el fútbol aquí en Argentina, parece ser que ver a 11 tipos corriendo atrás de una pelota es más divertido que cualquier otra actividad, profieren gritos contra el aparato televisivo a modo de descargar su ira e impotencia. Digamos que muchos de los fanáticos del deporte, son incapaces de jugarlo bien, pero sin embargo creen ser expertos en la materia. Sería como decir que uno es director de cine por haber visto muchas películas, o escritor por haber leído muchos libros. Sinceremosnos muchachos, les dan una pelota y al patearla la mandan a la casa del vecino, ese que tiene los doberman que te la muerden antes que caiga y la revientan, pero cerca del arco, jamás; entonces por qué nos dedicamos a opinar de algo que no sabemos, y encima nos preocupamos por los jugadores y por su equipo favorito, como si hubieran participado del partido ustedes mismos, o ellos fueran familiares nuestros, usted cree que ellos se preocuparían por usted cuando se le descomponga el automóvil en medio de la autopista? o cuando no le alcance el sueldo para llegar a fin de mes? no, les importa un comino su vida, cobran fortunas por patear la pelotita y son recompensados como héroes de guerra, y en cambio usted trabaja como un desgraciado todo el día para sobrevivir sin lujo alguno claro. Tendrían que filmarlo a usted todo el día, más que a esos infelices que patean pelotitas en un campo rectangular.
11-Podemos estar de novios o casados con la mujer más hermosa del mundo, una modelo famosa, una chica playboy o lo que sus fantasías le permitan, pero sin embargo, no podemos evitar girar nuestras cabezas para mirar un trasero de cualquier hija de vecino, es algo instinctivo, uno DEBE mirarle el trasero a la chica que pasa, por más que no sea más linda que la mujer que tiene al lado. Esta actividad por lo general debe ser acompañada de un codazo a su amigo para que lo imite en este accionar y algún comentario obseno. A la vez, tampoco podemos mantener la mirada fija hacia los ojos de una mujer con escote, lamentablemente los senos expuestos suelen ser una suerte de magneto que atrae nuestros globos oculares constantemente, y terminamos hablando con ellos más que con la persona que los exhibe. Según me ha contado una vez un amigo muy allegado, en una oportunidad un pezón le habló y terminaron tomando un café en un bar de la zona de Flores, obviamente él tuvo que invitar, pero lo curioso fue que el pezón convirtió el café en un cortado en un abrir y cerrar de ojos; dado que el mesero lo miró raro al sentarse acompañado del pezón, no le dejaron propina, y se retiraron indignados del sitio.
12-Cuando nos afeitamos, solemos dejar el lavatorio del baño lleno de diminutos pelitos esparcidos por todas partes (el espejo, el piso, la jabonera, etc.), si intentamos enjuagarlos para que se vayan de allí, no podrá retirar absolutamente todos (porque desistirá de inmediato de tan absurda e imposible labor) y será objeto de represalias por su pareja, quien le indicará que se afeite en la bañera/ducha, y sin espejo, a modo de castigo irónico infernal el cual probablemente cumpla sin más trámite resignado a lo que en suerte le toca.
13-Nos jactamos de ser los que llevamos los pantalones en la pareja, pero en realidad es la mentira más absoluta y absurda del mundo. NO SE ENGAÑE! las mujeres nos hacen creer que tenemos el control de la situación, para luego secretamente controlar nuestras acciones. Seamos sinceros, si usted pasa hoy por una casa de computación digamos, y ve una computadora nueva a buen precio, pero representa un buen gasto, cuál de las siguientes opciones hará?: A-Ponerse la gorra de CowBoy y masticar una pajilla a la vez que finge ser el dueño de una petrolera multinacional, entra al local de informática pateando la puerta y le dice al chico de lentes gruesos que atiende "NECESITOU UNA COMPUTADORAU AHORAU AMIGOU!", le tira un fardo de billetes y se va a su casa con la PC en la parte trasera de su camioneta 4x4. B-Se pega a la vidriera y mira el adminículo electrónico, luego le pregunta el precio y las cosas que trae al muchacho de lentes y anota todo en un papelito arrugado, con una birome prestada, para retirarse del lugar diciendo.. "Tengo que consultarlo con la almohada" para justificar que debe preguntarle a su esposa si puede hacer la compra, ya que tiene otras obligaciones para con ella. Obviamente va a tomar la opción B, si, usted no puede decidir nada sin antes consultar con su esposa, de hecho ni la forma de vestir (ver apartado 9). Otro ejemplo, usted va a una reunión con amigos, y lleva a su novia/esposa, la esta pasando bárbaro, son las 2 AM y la fiesta esta en su "clímax", repentinamente su pareja lo mira de reojo a la vez que le señala el reloj que lleva puesto y sube y baja su pie derecho repetidas veces; usted qué hace? A-Se vuelve a poner el gorro de CowBoy y frente a toda la gente de la fiesta le dice a su pareja "HEY MUCHIACHIA, SI DESEAS VOULVER, ALLI ESTA LA PUERTA!" a la vez que extrae dos revólveres de entre sus ropas uno con cada mano y efectúa diversos disparos al aire, perforando el techo de la vivienda donde se encuentra, al grito de "UIIIIIIIIIIHAAAA!!!", luego toma una botella de tequila y la vacía de un saque, a la vez que agarra a otra mujer de la fiesta y cachetea sus nalgas. B-Le implora a su mujer que le deje disfrutar unos minutos más de la fiesta, logrando obtener la clemencia de esta última durante unos 15 minutos, para luego reiterar el proceso una vez más fallando en su intención, motivo por el cual recoge sus pertenencias en silencio y saluda a sus amigos tristemente, diciendo "BUENO, ME TENGO QUE IR CHICOS... *EXCUSA* MAÑANA DEBO TRABAJAR TEMPRANO EN LA OFICINA...". Obviamente hará lo descripto en la opción B, por más que simule tener el control de la situación (ya que consiguió 15 minutos de más.. wow), sabe que si desobedece a su pareja, ello acarreará una discusión inútil e interminable de la que no quiere participar, y terminará con la falta de sexo esa noche/semana.
14-Somos incapaces de recordar fechas importantes, no tenemos esa virtud a diferencia de las mujeres, que llevan agendados los aniversarios, cumplemes, santos, día de San Valentín, cumpleaños, etc. etc. etc.; y encima cuentan años, meses, semanas, días y horas. Probablemente la mente masculina viene sin agenda incorporada, o sea, en algún momento nuestra pareja nos sorprenderá con algún obsequio inesperado y nos dirá "FELIZ DIA!! NO TE ACORDAS QUE DIA ES HOY?" entonces usted recorrerá los pasillos llenos de papeles en el piso ubicados en su mente, tratando de buscar desesperadamente en vano qué fecha importante se celebra ese día, con suerte adivine o mire el calendario de su teléfono celular como ayuda memorias si es ágil, en caso contrario puede desatar el apocalipsis en el lugar en que se encuentre. Eso sí, encuentre una excusa para la falta de regalo como por ejemplo "TE COMPRE UN REGALO, PERO SE LO COMIO EL PERRO" (luego recordará que al "Duque" -el perro- lo sacrificaron hace dos años y su rostro tomará un color rojizo). Por último recordará que hoy se cumplían 9 meses, 4 días y 3 horas con 45 minutos desde la primera vez que conoció a los padres de su pareja, y formaban a su vez el número 94345 (últimas cifras del DNI de ella)... cómo no recordarlo.
15-Sólo podemos hacer una cosa al mismo tiempo, y a ésta le dedicamos toda nuestra atención, si alguien nos habla mientras estamos intentando hacer otra cosa, probablemente fingimos estar escuchando, pero no se engañen, solo ponemos el "piloto automático" y contestamos con monosílabos (ver Parte I de la Guerra de los Sexos). No se atreva a intentar interrumpir la labor de un hombre concentrado, porque puede desatar su mal humor (léase, si está haciendo el fuego para el asadito, no le diga algo así como "ME PARECE QUE EL PAPEL SE PONE ABAJO DE TODO" porque probablemente tire la carne al pasto, se siente sobre ella, mueva su cintura violentamente de un lado a otro, y luego le diga "BUENO, HACELO VOS MEJOR ENTONCES QUE TANTO SABES" y se irá indignado.
16-Los hombres suelen hacer cosas para probar su hombría! deben demostrar todo el tiempo cuán macho son, a modo de ritual salvaje entre antílopes peleando por las hembras de la manada, harán cosas extremadamente idiotas, por ejemplo, abrirán botellas de cerveza con los dientes a costa de romper el vidrio o sus preciados molares, o sino contraerán latas de bebidas contra su frente al grito de "TOOOOGA!! TOOOOGA!!", también compiten a ver quién tolera la mayor cantidad de ingesta de bebidas alcohólicas al punto de vomitarse encima de sí mismos y todo lo que los rodea (si, las cortinas están incluídas) la vez que dicen "NO ESTOOOY BOSSHAACHOOO..", dentro de un gimnasio, somos capaces de intentar levantar el triple de peso de nuestra capacidad para ser más hombres que el resto, y terminamos con las mancuernas aplastándonos el pecho y suplicando ayuda en voz bajita por la imposibilidad de respirar. Por último algunos enfermos compiten por ver cuántas mujeres besaron en una noche en el boliche bailable y al final de la noche comparan resultados... inhumano.
17-Los hombres tememos a los compromisos, tan así que evitamos casarnos, tener hijos, ir al supermercado o al dentista, nos da MIEDO, tenemos fobia a hacer pasos importantes que impliquen sentar cabeza o envejecer, si por nosotros fuera, viviríamos con nuestras madres hasta los 40 años para no tener que cocinar y sacar la basura. Lo único que nos hace cambiar de parecer es: A-el motivo enumerado en el punto 13 o B-El deceso inminente de nuestra madre.
18-Cuando nos enfermamos, somos muy maricones, si... nos encanta quejarnos como si estuvieramos por morir, para recibir atenciones, la verdad es que por ahí es un resfriado común lo que tenemos, pero por como agonizamos, creo que sería la tisis o la fiebre amarilla!, si las mujeres al padecer el período menstrual hicieran un berrinche directamente proporcional al nuestro, la civilización como la conocemos no existiría.
19-Nos la pasamos pensando infidelidades y sino concretándolas, nos sentimos orgullosos de ello, incluso filmaríamos cada vez que fuimos infieles para verlo luego en la tele con un Home Theatre con pochoclos, pero ahora si, cuando se trata de nuestra propia pareja que nos es infiel, resulta que es inaceptable! inmoral, contrario a las buenas costumbres! digna de ser apedreada en la vía pública por su actitud. Sólo puedo decir esto "ojo por ojo, diente por diente" el Código de Hamurabi era jodido.. si..
20-Contamos anécdotas del pasado, y las repetimos constantemente a las mismas personas, por lo general esta costumbre se vuelve más frecuente con los años, notarán que los padres y abuelos suelen contarnos siempre lo mismo, una y otra vez, como si no fuera suficiente con escucharlo la primera vez, a quién le interesa escuchar unas 725 veces en dos años, que en 1989 ellos trabajaron como acomodadores de cine en Palermo, y que en aquel tiempo los cines tenían como mucho 20 asientos, y la pantalla era de 21 pulgadas, los proyectores eran tan grandes que ocupaban toda la habitación, y las palomitas de maíz se llamaban así porque estaban hechas con partes de palomas... Aparte como si fuera poco, la rutinaria narración se nos clava en la memoria, de modo tal que a medida que avanza el relato, podemos completar las oraciones que dejan en suspenso porque se les fue olvidando con los años, es como el programa de Larrea.. Seis Para Triunfar era creo.. "...Cuando yo era acomodador de... PLIN PLIN PLIN!".
21-Somos incapaces de demostrar afecto en público, cuando estamos con una mujer quizás le decimos "mi amor, mi vida" le damos besitos en el cuello y todo.. pero cuando estamos en público la llamamos por el nombre de pila, y caminamos distanciados, despreocupados, cualquier intento de demostrar cariño sería una manera de perder virilidad, y eso es algo que no podemos tolerar (ver apartado 16). Ni hablar si tenemos que comprar flores y andar por la calle con el racimo a upa, es un desprestigio para el género, probablemente recibamos miradas acusadoras de otros hombres aledaños, y algún grito a la lejanía que se oye algo así como "....UUUTOOOOoooo...!"
22-Tenemos una restringida habilidad para notar los cambios, somos muy desatentos para los detalles, por ejemplo, si una mujer se cortó el pelo y se lo tiñó un poco más oscuro, o se puso extensiones para verse más bonita para su pareja, le preguntará "NO NOTÁS NADA DIFERENTE?" a lo cual el hombre puede responder cosas como por ejemplo a saber: A-"TE TATUASTE?, AH NO, ESE DRAGON EN LA ESPALDA YA LO TENIAS DE ANTES", B-"CAMBIASTE LAS SILLAS!?, AH.. NO.. SON LAS MISMAS QUE TENEMOS HACE 13 AÑOS" y C-"ESA REMERITA ES NUEVA NO? TE DIJE QUE NO GASTARAS MAS GUITA QUE ESTAMOS CORTOS PARA LLEGAR A FIN DE MES Y LA #@@##@@#!" (conste que no notará que la remerita era la misma que le regaló en su primer aniversario tampoco).
23-No nos cortamos las uñas de los pies muy seguido, intentamos que lleguen al extremo de tocar la punta de nuestros zapatos y se pongan amarillas, para luego poder pelar papas únicamente con los pies. Si no es el caso, probablemente se corte las uñas de una forma autóctona irregular y asimétrica, dejando una suerte de recuerdos en la alfombra de la habitación (restos de uñas), más allá que al mirar sus pies dará la sensación que las cortó una persona ciega con el mal de Párkinson, de espaldas, y con un cuchillo desafilado.-

Bueno, cumplí, son las 15.40 hs., pero logré hacer 23 items de autocrítica masculina... FIUUU!! pensé que no llegaría nunca este momento.

Para terminar, les informo que durante la semana que viene estaré de vacaciones del trabajo felizmente (SI, soy un mal compañero que deja a todos en banda con el triple de laburo cuando falta gente!! PADEZCAN LO MISMO QUE YO!! TOMEN UN POCO DE SU PROPIO VENENO... SORETES!! -a la vez que digo esto tomo un termo cargado con kerosene y rocío toda la oficina riéndo a modo de villano de película de antaño, a la vez que coloco la punta de mi dedo meñique extendido con el resto del puño cerrado, sobre el extremo derecho de mi labio, a modo de "Dr. Evil" de la película "Austin Powers", al cerrar la puerta me enciendo un cigarrillo y lo dejo consumiéndose cerca del hidrocarburo desparramado por el piso, a la vez que tomo el manubrio de mi motocicleta, la pongo en marcha y huyo rápidamente quemando caucho, impulsado por la explosión, a la vez que grito "JUAN MOREEEYRAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!".

Nos veremos dentro de una semana seguramente cuando concluya mi breve lapso de paz, y regrese aquí para ver una pila de expedientes para leer que me saludan, y bailan, como esas malditas empanadas... las odio.

Saludos!

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